La postura del Ayuntamiento de Córdoba se repite todos los años en la comisión de conciertos. Rechaza todas las solicitudes de ayudas para los centros concertados si no hay necesidad de crear nuevas plazas en una zona escolar y si la ratio no se sobrepasa. Su filosofía es clara: "La educación concertada es subsidiaria de la escuela pública". Así lo entiende la concejala de Educación, Elena Cortés, quien cree que hay que potenciar la red pública de educación, tal como acordó el pleno el pasado jueves, que, a su vez, rechazó la proposición del PP de ampliar los conciertos, como los del colegio Cervantes. Cortés insistió en que mientras que haya plazas públicas es un "despilfarro de recursos" la concertación. Es más, las ayudas destinadas para los conciertos, a su juicio, "restan financiación" a la educación pública. Por ello, mostró su rechazo a que "los impuestos de los trabajadores financien la educación concertada".
Bartolomé Caballero, representante municipal en la comisión de conciertos, apuntó que "es preferible" crear unidades nuevas en centros públicos y no suprimirlas, antes que aprobar ayudas para nuevas aulas concertadas. Además, pidió que el sector de la pública tenga representación en esta comisión. (Leer más >)